domingo, 11 de junio de 2017

Aquí me quedaré.



Hoy tal vez no me quieras volver a ver.
Pero esta escrito.
Perdiste la habilidad de solo imaginarme.
De modo que tendrás que descubrirlo entre tus palabras.

Y en la desesperación más común de adaptarse 
Te irás desgastando en el intento de olvidarme.
Resistiras vivir en el olvido.
Pero será extraño, porque has sobrevivido en aceptarme.

Los días se mueven incómodos recordando a el último secreto en donde nos volveremos a encontrar nuevamente.
Se quebraran los segundos y emergerá el momento preciso de la reconciliación esperada.
Ahí nuestra felicidad tiene su refugio seguro
Y salvará a él amor que hasta la fecha está perdido.

Me volverás a mirar.
Y no podrás disimular que me extrañas.
Porque te prometí volver y ya lo hice.
Aunque tal vez no me quieras como antes.

Nunca más me iré diciendo adiós.
No lo haré porque te extraño enfermamente.
Aquí me quedaré.
Y esta vez es para siempre.

Poesía.
Miguel Adame Vázquez.
12/06/2017.

sábado, 10 de junio de 2017

El viento.


El viento se confunde con el odio.
Poco a poco va escalando a solas por el aire.
El viento se hace un cielo que pronto va a quebrarse en millones de lágrimas que caen sobre de ti. 
El viento es cruel cuando la vida es solo cenizas.
El viento las sopla hasta apagar las velas de su tiempo y las esparce por todos lados lejos de aquí.

El viento se disfraza de muerte.
No es una corriente alegre, pues furiosa disipa a la risa que anda alegre sonriendo por ahí.
El viento agita las hojas de los árboles.
Quisiera poder derrumbar tus deseos maternales.
Y lograr que el árbol joven lloré porque es incapaz de florecer un poco más.

El viento apacigua los gemidos que te mantienen con el hambre de vivir. 
El viento arrulla a una soledad de cementerio.
El viento quisiera poder despertar a mis sueños a media noche y así olvidar que al otro día con un impulso salvaré a mis risas de la tormenta de ti. 
El viento te roba la memoria.
Con un soplido te grita los recuerdos de cada pedazo inconcluso de la vida que quisieras seguir.

El viento quisiera poder hacer que cayeran una a una todas las estrellas. 
Y así poder lograr que todos fuéramos huérfanos. 
Y al poder borrarnos la memoria, dejáramos de buscar en esa bruma todo lo que nos queda.
El viento quiere sofocarnos en los intentos de tenerlo todo.
El viento quisiera que no pudiera respirar más al aire que se ha apresurado sobre mí.

El viento tiene la última palabra.

Poesía.
Miguel Adame Vázquez.
10/06/2017.



jueves, 8 de junio de 2017

Soy vida y muerte (un poema de @MiguelAdame & @SolitarioAmnte)


Algún día veré la luz que iluminaba el firmamento.
En aquel momento todos los ojos serán una imagen triste que recuerda mi presencia en la distancia ausente.
Derramaran a cántaros los remordimientos de una vida pasada.
Porque no habrá nada que impida que la semilla original  no deba volver al suelo de donde fue tomada.
Será una historia que se repita como tantas historias.
Porque nada volverá a ser materia inamovible que permanezca intacta en su último acto de amor por el
aliento supremo.

Mi alma trémula se debate en una argumentación interna.
¿Habré hecho bien todo lo importante en ésta vida?
¿Cumplí con creces todas las expectativas?
¿Las mías, las de mis seres amados, las del universo o de la divinidad que me guió a trazarlas?
¿Habré vivido con todo y para todo aquello que se escribió de mí en las estrellas desde antes de la fundación del firmamento?

La vida es un regalo costoso.
Un don maravilloso que nace de la nada.
Una gota de rocío en un árido desierto.
La vida es una palabra hermosa que acaricia como verso al universo.
La vida es una chispa de amor que se contagia con ternura y un té quiero.
La muerte trae la vida.
La vida algún día solo será el recuerdo de la muerte.

La vida dura el efímero instante que tarda la caída de un granito del reloj infinito de las arenas de todos los tiempos.


¿Es la muerte la que se lleva a la vida?
La muerte dura una infinitud de eternidades.
Es cada nueva vida en el reciclar divino de la esencia de cada presencia que pisa un plano estelar desconocido.
Estuve aquí por un propósito de magnitudes cósmicas que fue intransmisible mente mío.
No soy tan solo un engranaje, una pequeña tuerca o tornillo en el justo espacio vacío de la máquina colosal de una multitud de universos.
Soy tiempos y realidades.
Soy vida y muerte.

Soy vida y muerte (un poema de @MiguelAdame & @SolitarioAmnte)


miércoles, 7 de junio de 2017

Esclavo de las palabras


Nos convertimos
en esclavos de las palabras. 
Ninguna mañana merecía amanecer
con un cielo azul y esplendoroso
si no florecía en nuestra boca.
De nada valió que amáramos
a un firmamento
que recorre la noche entre las estrellas
que iluminaban fugaces
los deseos de dos corazones 
que siempre callan.

Dejamos de confiar en los pasos,
en ésa sonrisa poderosa
a la cual nada le importa
más que poder ser querido,
y ser feliz en un mundo
incompleto y desolado
donde las sombras
no son buen refugio
para esconderse del sol
despiadado,
lleno de mentiras
que consumen los deseos
y la última oportunidad
de perdonarnos.

Fue algo maravilloso...
Llevar el universo al corazón
y defender la eternidad
entre las galaxias,
éramos capaces de hacerlo
con sólo mirarnos.
Ahora no sabemos
si todo ha sido en vano,
pues la piel nos habla a gritos
del recuerdo, del pasado.

No querer que sea mentira,
saber que las estrellas se mueren
y no tener agallas para afrontarlo.
Así que simplemente
solo nos convertimos
en esclavos de las palabras
para esquivarlo.

En el próximo destino
escrito y sumergido en la memoria,
seguiremos esperándonos.
Quizá, ésta no era la vida
que prometían las palabras.
Nos quedaremos en silencio
esperando el milagro,
poder escuchar nuestras voces 
en otra realidad posible,
en otro mundo.
Aunque no sea real
y todo esté inventado.
¡Qué más da si era mentira!
Jamás nos diremos nada...
si no seguimos soñando.

Esclavos de las palabras (Un poema de @Adamemiguel y @verinlechuza)



martes, 6 de junio de 2017

Dolerá


Dolerá el frío que cala en la nostalgia de un día con mucha lluvia en donde el viento aprendió a pronunciar tu nombre.
Dolerá el tiempo que se esfuma en las noches que han pasado por tu ausencia.
Dolerá el recuerdo de un dolor adictivo que no ha aprendido a saber olvidar.

Dolerá la letra pegajosa de esa canción preferida que todos escuchan en la radio y que solo trae a mi memoria tus ojos benditos.
Dolerán tus poemas escogidos de Neruda en el último librero de una esquina que se rehúsa a ser simplemente olvidada.
Dolerán tus caricias que fueron un bálsamo para tantas heridas que se niegan a ser curadas.

Dolerán tus abrazos candentes de alegría en un corazón que no perdona tener que amarte a la distancia.
Dolerán las horas que se convierten en refugio de tus besos prohibidos.
Dolerá tu olor a victoria pasada y añeja en un mundo inmediato y superfluo que no termina de convencerse que eras todo lo que necesitaba para poder seguir.

Poesía 
Miguel Adame Vázquez
07/06/2017.


  

lunes, 5 de junio de 2017

Silencio


¿Cómo podríamos estar despiertos?
Si tu sueño habla de tener que estar muertos.

No es una anécdota que fluya sencillamente en el laberinto de las palabras.
Es un dolor angustiante que sangra por el esfuerzo de querer estar solo vivos.

Pero aquí está tu ataúd esperándote.
Se ha vestido de saco y pompa como si quisiera lucirse en una fiesta que emana dulces aromas de jazmín y rosas.

Tienes hambre y sueño eterno.
No es un vacío angustiante que pueda saciarse simplemente con la lectura de lo que será un buen principio de tu mismo fin.

Simplemente llegaremos a donde tengamos que llegar en su momento exacto.
Esperemos con calma que nos invada el silencio.
Porque ese instante será el mejor regalo en donde no está ya más tu voz.


Poesía 
Miguel Adame Vázquez
06/06/2017.




domingo, 4 de junio de 2017

Cats


Cats (@MiguelAdame y @Verín)

Sus pequeños ojos
no pierden detalle
del movimiento del viento
que sacude con ternura
a una pluma en el aire.
Son seres celestiales
que protegen a mis sueños
de los malos ratos.

Es ruin
escuchar su tenue maullido
y no correr
a tomarlos en los brazos.
Su ronroneo alivia mi alma
del dolor de un cuerpo
que no  se quiere escapar
de lo más maravilloso de éste mundo.


Y sólo tú bajo una mirada penetrante,
me obligas
a intentar soñar de nuevo.

A veces,
me escondo de la tristeza
en mi rincón de silencio,
cuando las lágrimas 
empiezan a gritarme. 
Es cierto...
Ése dolor del cuerpo, 
también maulla.

Es entonces, cuando
se acerca a mí sigiloso
como un rumor 
que se entrelaza
dulcemente entre mis piernas. 
No necesita palabras
para decir que me entiende
pues es con su calor,
con su suave murmullo 
como me calma
y alivia el escozor
de mis heridas.

¡Qué mayestático milagro 
esconde anudado a su instinto!
Pequeño felino radiante...
No te alejes de mi destino
Proteje a mis sueños que te esperan felices 
en un mundo felino de amor.


Un poema de Verín y miguel Adame 

Etiquetas

Sígueme en Twitter

@adamemiguel

Sígueme en facebook

https://www.facebook.com/poemasmigueladame/

Es tu poesía

  Otra vez silencio cuerpo ciego al borde del universo. Verso sin la fábula que arde vientre que apenas sabe vivir, la tierra se hunde sin t...

Muchas gracias.

Queridos y apreciados lectores:

Solo tengo más que agradecimiento para cada uno de ustedes que se han tomado unos minutos de su valioso tiempo, para leer mis poemas.

Gracias al Internet, a la gran nube, he podido llegar relativamente a todos los rincones de la tierra, a toda hora y en todo momento solo con una conexión a Internet.

Me llena de satisfacción saber que muchos de ustedes son de países tan lejanos.

Espero poder seguir compartiendo en un futuro, más y más de mis poemas y tenga el honor de ser leído en su corazón.

Gracias eternas.

Su amigo.

Miguel Adame Vázquez.

Buscar este blog

Seguidores

Sígueme en Yotube

https://www.youtube.com/user/71ADAME

Contacto

correo: adame.vm@gmail.com

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Todas las Poesías.

Gracias por tus comentarios.

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Archivo del blog