Creímos amarnos
solo con un cielo estrellado,
pensamos que los ojos reflejan
un corazón enamorado.
Que el viento doblega naufragios
que se hunde el recuerdo
en un velero olvidado,
pero vuelven los remordimientos pasados.
Fuimos vigilantes
sin perturbar los sueños
sembrando rosas
con la esperanza de vernos de nuevo amados.
Creímos que el tiempo no pasaría
que el suspiro es eterno
ante el murmullo del viento
que ingenuo fue nuestro confidente ganado.
Se pierde el cariño en confusiones
en palabras cortas
como un remedio entregado,
pero el amor no fulgura en un cielo espinado.
Así que necesitamos más que eso
un racimo de sol y vientos huracanados,
una tarde cálida para redimir el pasado
una nostalgia liviana para olvidar los besos robados.
Lejos del rencor de un poema quieto
de palabras vacantes
del sabor del frío
del el silencio avaro
uando el amor muere olvidado.
Ya no creo en nada de eso,
creo en la paciencia de un amor entregado
en el amor eterno más que encarnado
en la fiel presencia de un calor fundado
en la cuerda triple que nunca he olvidado.
No necesito creerlo es mejor demostrarlo,
lo demuestras a diario
después de tantos años ganados
el amor es para siempre.
Él Mute
09/08/2019.
