Después,
siempre será después,
y después ya no hay nada.
Abrigo de noche
dame esperanza,
que los tulipanes merecen el frío.
Viento
ofreciendo consuelo y frío,
sueños que buscan
el agua del río.
Nieve
las aguas hierven,
al borde del tiempo
se encuentran los gritos.
Soles
caricia del fuego,
las ideas surge
cuando llega su fruto.
No corras de prisa
detente,
de todas maneras
no alcanzas el tiempo.
Ese transcurre gozoso
sabiéndolo todo,
sabe de ti,
tu calendario.
Se ríe de cómo malgastar tú vida
creyendo que lo tienes todo,
y no tienes nada.
Solo recuerdos,
recuerdos del tiempo,
se venden baratos
el precio es un aliento,
aliento de vida.
El último suspiro
ese que sabe
a querer estar vivo.
Después,
siempre será después,
aunque después sea
demasiado tarde.
Así siempre ha sido,
juegos futuros
el abismo crece
con todo sentido.
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