sábado, 18 de noviembre de 2017

Bambú




El bambú creció
queriendo solo llegar al cielo,
expandió sus horizontes
hasta donde alcanzo su propios versos
llenando con su follaje el universo.

Hoy absorbe la luz que oscurece a otras plantas
no le importa que el viento y el frío sacuden sus ramas
el bambú crece echando sus raíces profundas
ocultándose de los ojos que solo quieren
ver más allá de las hojas que reverdecen en calma.

El bambú vivirá por muchas generaciones futuras
será el escondite perfecto para huir de las llamas
el sol no penetrara ya más allá de sus fuertes y flexibles brazos y si es preciso aguanta con calma
la nieve que escurre por sus hojas largas.

El bambú nunca dará fruto
ni caerá presa de las plagas
es fuerte su legado y extenso
así que nada le roba el placer de existir
en donde no crece nada.

El bambú tiene historias
que algún día serán contadas
su amor crecerá
conforme encuentre el equilibrio de vivir
sin importarle ya nada.

Yo quiero ser como el bambú que canta acariciando
a él firmamento en una noche estrellada,
yo quiero como él extender con el viento su lira impregnada de bellas palabras.

Yo quiero ser como el bambú
cuando el tiempo tenga que pasarse de largo
y se detenga a escuchar esas historias
que alguna vez salieron sin prisa
de un mundo seco sin habla.

Poesía
Miguel Adame Vázquez.
18/11/2017.





jueves, 16 de noviembre de 2017

El último secreto.



Basta con abrir el cajón de tus recuerdos
para darte cuenta del desorden
que ocasiona tú pasado en una culpa
que se apega para bien morir.

Yo no seré uno más de tu colección de culpas,
vives como si solo estuviéramos aquí
para consumirlo todo
hasta dejar simplemente de existir.

La familia para ti siempre fue un teatro de sombras
verdades y mentiras
relatos de una infancia carbonizada
por unas cuantas imágenes que no se olvidan.

Tal vez necesitarás millones de años
para convencerte que ese enojo
te llevará a convertirte
en eso que tanto te molesta.

¿Yo quién soy para juzgarte?
nunca seremos pensamientos exentos
ante la mirada inquisidora de aquel que quiere
aprovecharse de tu locura.

Nada me cuesta amanecer honrando a la vida
he visto cómo el cáncer llega con el crepúsculo
de los asuntos pendientes
que solo hacen amanecer en las tinieblas.

Solo me preocupo por vivir y dejarte vivir
maltratando a nuestros miedos
hasta conseguir envenenarlos
con la esperanza suficiente para poder partir.

El milagro de la vida amanece
sin la oscuridad de una noche
que se siente cómoda en las tinieblas
ahí es donde entro con un salvavidas que no sé usar.

Nadie me entreno para soportar
el terrorismo de tu mirada
que renuncia a seguir luchando
porque restas a todos chantajeando voluntades.

Yo sobreviví a los mismísimos dolores
que te corrompen sin ninguna prisa aparente
yo te enseñaré calladamente
que el secreto es amar para vivir.

Poesía
Miguel Adame Vázquez.
17/11/2018.










miércoles, 15 de noviembre de 2017

Las cosas que siempre fueron gratis


A veces los delirios se transforman
eA veces los delirios se transforman

en pedazos que ya nadie recuerda  
se vuelven recuerdos de una vida vieja
donde el vestigio del pasado
nos deja un desenlace intraducible
de unas últimas palabras
que balbucean irreverentes la última esperanza
para no morir de un eterno tedio.
Dicen que el polvo que navega frente a mis ojos
fue alguna vez tu piel
vivió de sus propias historias,
hasta que la realidad finalmente la abrumó
con un cansancio casi inerte por el frío
que bajó las defensas que alguna vez amurallaron mis sueños
jamás pude volver a dormir con esperanza y no tener que soportar
ese mañana en el que se sueña con ser mejor.

A veces la ansiedad aprisiona a los desvelos
con tantas ganas para no despertar jamás
que pintamos un cuadro lleno de ilusiones por lograr
las cosas cambian sólo porque tienen que cambiar,
nadie dejará de sujetar tu cuello amoratado
simplemente por una débil piedad
tienes que huir antes que las marcas
no se puedan borrar en realidad.

A veces las sombras dejan caer su suave velo
y nos muestran quienes realmente nos creemos,
tenemos miedo de olvidar nuestros sueños
por descuidar nuestro desvelo
desalineando nuestro cuerpo pensando que con eso
distraemos al cuidador de las poesías
a el amante de los versos
pero eso simplemente no sucede porque la prosa no tiene dueño.

A veces, solo a veces no es siempre
y rogamos olvidar todas las ofensas que se acumularón
como craneos en el caos del invierno  
queremos quedarnos solo con lo que es bueno y saborear lo bien que se siente
intentarlo de nuevo aunque esas sean nuestras últimas palabras escritas
de una mirada que disimula no poder ya leer
nos hemos quedado sin el tiempo para comprar las cosas que siempre fueron gratis.

Poesía.
Miguel Adame Vázquez.
16/11/2017.

lunes, 13 de noviembre de 2017

Hasta el silencio brilla.



Hasta el silencio brilla
en donde no hay respuestas
¿que hicimos para que nadie nos escuche?
¿que hice para que hasta el viento
sople triste recordando a mi memoria?

Somos pasajeros de un espejismo sin consuelo
tal vez por eso nunca comprendemos
la huida del calor del dulce hogar
antes de que el frío de invierno
llegue en primavera.

Fui como despojo de una marea alta
que azota con la fuerza de las verdades
me quedé atónito ante la zozobra del tiempo
que se encuentra casi enfermizo
para ganar la partida al último recuerdo.  

Un día de estos será para siempre
por lo menos para el agobio
ya no será más desventaja
nos volvemos invisibles
para unos ojos que no quieren vernos.

Hasta el silencio brilla en estos lunes
que son más lentos que cualquier otro día de la semana
en ellos duele la rápida mañana
que no se compadece al vernos juntos intentándolo todo por nada
nos hemos vuelto invisibles.

Poesía
Miguel Adame vázquez.
14/11/2017














sábado, 11 de noviembre de 2017

Siempre encontraremos la forma .





Cada minuto es diferente
nada es inútil en esta esfera que rueda inconsciente aunque no sepamos a dónde van todos los días
sencillamente pasaremos.

Nunca dejaremos de fluir con el tiempo
aunque apresuremos los segundos
y les contamos los pasos
ellos caminarán seguros cada vez que quieran ir lento.

Solo tenemos que reconocer en esta vida
cuál es nuestra manera de escuchar viéndonos,
nunca abandonemos
las otras formas de entendernos.

La letra fue muy torpe y borrosa
cuando decidieron insultarnos,
los ojos que nos juzgan siempre
morirán por lo que no tenemos.

Cuando ya no quede un solo árbol
y la ceniza nos cubra con su velo inerte
y el aire sea solo polvo, no desistas
florecerá la vida de ese páramo triste.

No sientas vergüenza al escuchar los gritos de la muerte
ella nos querrá desnudar impaciente
pero ánimo
aparecerá la culpa a la cual le teme.

La palabra de este mundo es solitaria y vacía
pese a todo ello seguiremos iluminados
bajo la sombra que siempre reconforta.

Encuentra la manera de revivir tu fe quebrada
aunque solo tengas para ello
una gota de agua
será suficiente para reverdecer las rosas.

No temas a él mañana triunfará la verdad sobre la codicia, esa que desprecia a un cielo azul y esplendoroso, aunque cada minuto sea diferente
nunca fallará la memoria para poder quererte.

Nunca olvidemos a la amenaza que es oculta
esa que esconde a el verdadero verdugo
que como enemigo nos prefiere ver muertos
que heroicos y heridos pero fuertes.

Encontraremos todas las respuestas
a las preguntas que nacieron
nunca se nos acabará el tiempo será suficiente
para no darles el gusto de llorar por ello.

Poesía
Miguel Adame Vázquez.
12/11/2017.





viernes, 10 de noviembre de 2017

Esta vez fue de otros



Y apareció un punto en el papel
mancha indeleble en el libro que vivimos
¿acaso será una distracción de las cosas importantes?
solo me detengo a observar sin intentar salvarme.

No puedo evitar tocar su imperfección
la esperanza se borra del libro de la vida
cuando nacen las excusas es la historia
que escribimos juntos.

Decidí prestarle atención a eso que fue ajeno
sin tan siquiera saber de dónde venía
siempre será decidir con un cheque en blanco
un azar en el limbo de las mentiras.

Verdades que se desbaratan
con un nombre que nunca decidió no ser visto
nada lo detuvo y la voz se convirtió
en una conversación desesperada.

Así que respiro despacio
y con el avance de la noche
el frío poco a poco se va apoderando
de mi cuerpo como un objeto inerte.

El vacío fue un sueño profundo
me hizo volar en caída libre,
solo me importo saber cómo llegaría al suelo
nunca fue el vuelo al precipicio lo que llevó al vacío.

La mente descarga tanta electricidad como necesita  quiere despertarse del letargo que ahoga a los sueños, solo me muevo como si la vida se me fuera
de las manos y vivo.

En un pedazo de papel
escribiré el lienzo que soñé para tu vida
será muy despacio y sin prisa
borraré el rumor que adormeció a mi vida.

Duermo sin la tinta que ahoga a la memoria
despertaré con la esperanza
de poder volver a ver
sin la mente vacía.

Nunca quisiste ser el ombligo del mundo
y no lo fuiste hasta que los monstruos dolientes
generaron tanto odio en el subconsciente
que la cicatriz esta vez fue de otros.

Poesía
Miguel Adame Vázquez.
11/11/2017.










jueves, 9 de noviembre de 2017

La luz de la esperanza



Nos hemos desesperado tanto
que borramos la luz a la esperanza
silenciando el tenue estruendo de una vida
esa imagen insólita de vivir sin el pasado
no se puede dibujar en la memoria
ese tiempo que pasó de prisa
y que por nada se borra.

Si tan solo vieras
como un pequeño puñado de palabras
pueden lograr un milagro
podrías ver a esa neblina asustando
a todas las dudas que inquietas
preguntan si el sol mantendrá su pacto eterno
para salir de su guarida esta mañana.   

Tienes que renacer como aquel recuerdo del paraíso perdido
que algún día volverá a florecer con los olivos
si tan solo te dejaras tocar por el amor
abandonarías esa falsa creencia que el amar mata
solo tienes que abrir los ojos del anonimato que distrae
y disfrutar de lo maravilloso que es sentir la vida
cada vez que te esfuerzas por aferrarte  a tener calma.

¿Cómo escuchar ese silencio que en el aire te envuelve?
no lo sé todavía, no lo sabré con el bullicio de las aves del campo
que en su estruendo despiertan del letargo que aturde la calma
de una noche invadida de estrellas lejanas
innumerables todas ellas
para aquellos que nunca aprendieron a contar las alegrías
cada vez que la pena embarga.

No quiero nada para mí
solo un anhelo
un mundo en donde no seas más que solo una víctima
en donde la eternidad llegue con el tiempo
porque te prometí versos tiernos
que hablaran de la fuerza que da el sentir vivir
bajo la plenitud hermosa de haber hecho todo lo bueno.

Nos hemos descuidado tanto
que perdimos la pista de nuestros bellos recuerdos,
hoy será diferente mi historia de vida
dormiré satisfecho con tan solo saberlo
vendrán tiempos mejores con el aire de invierno
nada tendría sentido en esta vida sin la luz de la esperanza
yo te amé porque tú me amaste primero.

Poesía
Miguel Adame Vázquez.
10/11/2017.



Etiquetas

Sígueme en Twitter

@adamemiguel

Sígueme en facebook

https://www.facebook.com/poemasmigueladame/

Vivir para siempre

  A ninguna parte, nunca tuve tiempo para que las lágrimas llenaran el cielo. Confieso que se fue la vida en una pincelada de gaviotas y cie...

Muchas gracias.

Queridos y apreciados lectores:

Solo tengo más que agradecimiento para cada uno de ustedes que se han tomado unos minutos de su valioso tiempo, para leer mis poemas.

Gracias al Internet, a la gran nube, he podido llegar relativamente a todos los rincones de la tierra, a toda hora y en todo momento solo con una conexión a Internet.

Me llena de satisfacción saber que muchos de ustedes son de países tan lejanos.

Espero poder seguir compartiendo en un futuro, más y más de mis poemas y tenga el honor de ser leído en su corazón.

Gracias eternas.

Su amigo.

Miguel Adame Vázquez.

Buscar este blog

Seguidores

Sígueme en Yotube

https://www.youtube.com/user/71ADAME

Contacto

correo: adame.vm@gmail.com

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Todas las Poesías.

Gracias por tus comentarios.

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Archivo del blog