Los días pasan
son pocos los que quedan
son como un libro en una tarde olvidada
como una estrofa que nunca sabrá que nos hemos ido.
Los días son un tiempo disperso
un fuego que después de su fulgor es solo ceniza
un río que huye como la vida que se va de prisa
un momento que perdura sin ninguna premisa.
Los días son noches sin soberbia
poesía que con un verso se escribe
en el sonoro amor de un tesoro
que sigiloso siempre se cuida.
Los días huyen de una tarde precisa
de una puesta de Sol
que simplemente sucede
y que nunca vuelve el mismo día.
Los días se llevaron mi pasado
ese que construí con descuido
y sin ningún desenfado
dejándome alegre y muy nostálgico.
Los días no les importan tus planes
tampoco tus logros
o tus oscuros y complicados dolores
no llevan cuenta de lo que pasa, solo siguen pasando.
Los días me han dejado más sabio
para qué quiero ser sabio
si ya no me queda presente
solo futuro y el futuro lo tengo ganado.
Los días pasan con sus propias complicaciones
con su propia personalidad
sus propias traiciones
su propio amor al cual me aferro sin hacerme daño.
Días que llevan cuenta del pasado
que no cambiaría por nada por haberlos pasado
los días tienen el tiempo contado
soy optimista los tengo domados.
El mute
06/10/2018.
Me gusto mucho tu poema y sí los días pasan .
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