Silencio y angustia
nada perdura,
tengo miedo de partir
en un vacío eterno.
Distancia
sentir o morir,
romper el aire
con una palabra.
Despacio,
fuiste tú
quien me enseñó
lo invisible del tiempo.
Volví a vivir
llevando los vientos,
amando sin mirarte
ahogando mis sueños
en sus cenizas.
La gente olvida
lo que es el amor profundo,
lágrimas frías
que no saben oírlo.
Jamás veremos
el invierno y su crepúsculo,
la otra rivera
los pájaros en el horizonte.
Viento
para qué quiero el viento,
las estrellas están sin ti
escondiendo la bóveda del firmamento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Se vale la critica que propone.
El comentario que nutre. muchas gracias.